Pastel de vainilla: ligero y esponjoso

Hacer un pastel de vainilla perfecto se dice fácil, sin embargo a veces se requiere de tiempo y algunos secretos para obtener la consistencia ideal y tener uno ligero y esponjoso.

Confieso que intenté varias recetas de pastel de vainilla antes de llegar a esta, y aunque no todas fueron un fracaso, ninguna se le parecía en sabor ni consistencia. Una vez que la probé y vi el resultado, definitivamente no la dejé ir.

Tal vez esta receta lleve un poco más de preparación a comparación con muchas otras, pero te aseguro que el resultado es mil veces mejor.

RECETA:

Tamaño de porción: 2 moldes redondos de 9", quequitos más de 24.

Ingredientes:

• 2 2/3 tazas de harina (yo utilizo Cisne de Oro que venden en el súper, pero cualquiera funciona igual)

• 1/2 cucharadita de polvo para hornear (también conocido como Rexal)

• 1/2 cucharadita de bicarbonato

• 1 cucharadita de sal

• 1 taza o 2 barras de mantequilla sin sal

• 1 3/4 tazas de azúcar (puedes usar azúcar reducida en calorías, con la mitad de la cantidad)

• 2 cucharaditas de extracto de vainilla

• 4 huevos grandes

• 1 taza de leche

Preparación:

1. Permite que todos tus ingredientes estén a temperatura ambiente pues esto te dará la textura perfecta, esponjosa y ligera.

2. Precalienta el horno a 350°F o 176°C, engrasa y enharina 2 moldes de 9”, redondos (puedes usar el molde que tú quieras).

3. En un tazón mediano, tamiza (o mezcla con un batidor de globo) la harina, el polvo para hornear (rexal), el bicarbonato y la sal, y hazlo a un lado.

4. En un tazón grande, preferentemente el de tu batidora semi industrial, acrema tu mantequilla a velocidad baja.

5. Agrega a tu mantequilla (con la consistencia de una mantequilla para betún) el azúcar y la vainilla y bate a velocidad media por 9 o 10 minutos.

6. Añade los huevos uno por uno, asegúrate que cada vez que agregues uno esté completamente incorporado antes de poner el otro. Ya que estén los 4 en tu mezcla, bate por 5 minutos, adquirirás una consistencia más ligera y aireada.

7. Ahora, agrega 1/4 de los ingredientes secos de tu tazón mediano mientras bates a velocidad baja, cuando veas que se incorpora completamente, añade 1/3 de tu taza de leche, igual cuando esté totalmente incorporada, continúa alternando 1/4 de tus ingredientes secos con otro 1/3 de tu taza de leche hasta que la mezcla se vuelva suave. Es decir añade de poco a poco mientras bates. Asegúrate de raspar las paredes de tu tazón antes de sacarlo para que no quede ningún residuo que no se haya mezclado.

8. Vierte la mezcla en tus moldes y golpéalos un poco de los lados para que salga cualquier burbuja de aire y no afecte el resultado ni la consistencia.

9. Mételos al horno de 30 a 40 minutos o hasta que las orillas o la superficie se vean doradas y que cuando introduzcas un palillo salga limpio.

10. Deja enfriar los pasteles y decora a tu gusto.

A final de cuentas esto es solo el principio, deja fluir tu creatividad pues con esta receta puedes hacer quequitos o hasta cake pops. Espero te sirva y tengas un pastel delicioso y esponjoso listo para deleitar en cualquier ocasión. ¿Cómo hiciste el tuyo?

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